martes, 29 de septiembre de 2009

De técnicas de tortura y el pacto de San José

Hoy, quiero contarles algunos chismes que circulan en la web y los correos electrónicos. Por ejemplo, dicen que un grupo compuesto por expertos torturadores hondureños de los años ochentas en combinación con técnicos en torturas medievales ha estado trabajando en la mejor manera de sacar a Mel y sus seguidores de la embajada de Brasil. La mejor tortura deberá conbinar técnicas visuales y auditivas. Es bien conocido, por ejemplo, el uso de estridente música heavy metal por parte de comandos norteamericanos contra sus prisioneros de guerra.

Dicen que el mencionado grupo encontró la mejor técnica de tortura, que haría salir a Mel en menos de lo que canta un gallo. A mi me pareció espeluznante. He aquí la idea, que se deberá desarrollar en dos parte simultaneas: 1) colocar una gigantesca fotografía o pancarta del candidato presidencial Porfirio Lobo Sosa frente a la embajadadel Brasil, y 2)colocar estratégicamente altoparlantes a todo volumen, con estridentes discursos del abogado Oswaldo Ramos Soto permanentemente. Dicen los expertos que ni la más ferrea voluntad aguantaría esta combinación por más de 5 minutos. Cuando me enteré de la idea un escalofrío recorrió mi cuerpo.

Hoy leí en un periódico local un análisis del reconocido periodista Andres Oppenheimer. En su artículo, Openheimer plantea tres posibles escenarios futuros para la actual crisis política de Honduras, que son los siguientes: Escenario 1: La situación podría agravarse causando caos e ingobernabilidad, por lo que la ONU se ve obligada a enviar a las tropas de Cascos Azules, sacar a Micheleti a patadas, restituir a Zelaya y garantizar elecciones transparentes. Escenario 2: Zelaya se mantiene en la embajada del Brasil y los líos se van apaciguando hasta las elecciones de noviembre. Los gobiernos del mundo se ven en la obligación de finalmente aceptar la validez de las elecciones y el surgimiento de un nuevo tipo de golpe, regulador de los excesos de los gobernantes; y finalmente, el escenario 3: Que se logre un acuerdo, se acepte el pacto de San José, se forme un gobierno de coalición que supervise las elecciones, y la crisis acabará sin más complicaciones.

Openhaimer no toma en cuenta una cuarta posibilidad, que es la que temen la mayor parte de aquellas personas a las que los “resistentes” llaman “golpistas”. Ellos temen que, al llegar Zelaya de nuevo al poder aun siendo por poco tiempo, no importa cuantas comisiones de la verdad, ni cuanta vigilancia extranjera, ni las firmas que se hayan colocado, contra viento y marea este continue con sus planes y los del presidente Chávez de conquistar Honduras. Temen que con el cuento de cumplir con la voluntad del pueblo, que en realidad sería la voluntad de sus pocos seguidores, pronto instalaría una asamblea nacional constituyente. Desde luego, hay evidencia de este propósito. Los seguidores de Mel Zelaya piden desde ya una constituyente, dificultando la posibilidad del diálogo productivo. El temor no es infundado. Ya el presidente Chávez ha demostrado su perseverancia y tesón en la consecusión de sus objetivos, y una habilidosa manera de manipular la información en su beneficio.

Por mi parte, creo que este último escenario es improbable si (y solo si) en el marco del pacto de San José se obtiene una inclusión y un compromiso de nuestra Fuerza Armada, la que ha demostrado un profesionalismo ejemplar en la presente crisis. Para ello, el pacto deberá incluir la perdida de todo mando de parte del presidente de la república sobre la Fuerza Armada. Esto al menos temporalmente hasta la toma de posesión del nuevo presidente, con el objeto de garantizar la imparcialidad y la vigilancia, de parte del organismo armado, del cumplimiento del pacto en cada una de sus partes, lo que garantizaría a los “golpistas” que no habría consultas populares, constituyentes ilegales y perpetuación en el poder, y les permitiría un diálogo en un ambiente más seguro y relajado. Creo que los hondureños debemos apoyar el pacto de San José incluyendo la restitución de Zelaya, pero evitando por todos los medios posibles la ingerencia de Chávez y sus ideas en nuestro país. Ambas partes deben ceder en algo. Quid por quo, por el bien de Honduras.

Bueno, espero que la idea de la tortura visual y auditiva a Mel Zelaya no se lleve a cabo. Recordemos que es hondureño y debemos ser piadosos con nuestros compatriotas. Saludos.

domingo, 27 de septiembre de 2009

De pescados estreñidos y la distribución del poder mundial

Hace unos días estaba un poco preocupado. Mi hija tiene un pececito dorado que le regalaron en su cumpleaños. El mencionado pez, que mi esposa dice que más bien es pescada por la forma en la que mueve la colita cuando me ve, amaneció triste, manteniéndose en el fondo de la pecera. Como yo tengo algo de experiencia con la crianza de peces ornamentales me di cuenta de que estaba enfermo, por lo que supuse que pronto la tubería de aguas negras sería su próxima y eterna morada. El pez pasó dos días así. Finalmente nos dimos cuenta de su problema al ver un largo hilito negro colgando de su extremo trasero, después de lo cual el pez volvió a estar tan feliz como siempre. Mi esposa y yo, que somos médicos (aunque de humanos) hicimos rápidamente el diagnóstico. ¡El pez estaba estreñido! ¿Se imagina usted un pescado estreñido? Solo eso me faltaba ver en la vida.

Y digo esto porque el mundo está cambiando a una velocidad vertiginosa, y en la actualidad vemos cosas que no creíamos posible hace apenas 10 años, como el presidente de los EUA diciendo que no quiere hacerse responsable de la crianza de sus malcriados hermanos menores latinoamericanos, pasando esta responsabilidad a su homólogo de Brasil, quien amablemente rechaza el ofrecimiento diciendo que no se siente capaz. Propongo que esta responsabilidad le sea dada a Honduras. Total, estamos en el centro del continente, y nuestro actual presidente, aunque temporal, está demostrando tener más gónadas que sus homólogos de los países más desarrollados. Es más, en la actualidad tenemos una supremacía sobre los demás países del continente al tener dos presidentes. Recuerde, no siempre el hermano mayor es el más sabio, o el que termina mejor. Zeus por ejemplo, el más grande de los dioses del Olimpo, fue el hijo menor de Cronos.

En la última cumbre del G20 los países industrializados acordaron “descentralizar el poder”, otorgándole una mayor participación a las economías emergentes. Aunque esta decisión es sabia, aun está lejos de alcanzar la configuración organizacional óptima para que la sociedad global funcione adecuadamente. La descentralización deberá bajar a la escala de países instaurando nuevas formas de gobierno descentralizado. Por más genialidad y presencia que puedan tener los presidentes de los países miembros del G20, los problemas que demanda una sociedad globalizada cada vez más compleja escaparan a su control. Son tantas las variables, tantos los factores y tan rápidamente cambiantes…

Ya he propuesto en otros artículos de este blog una posible solución: el uso de la inteligencia colectiva, la instalación de un verdadero socialismo democrático en el que lo que se reparte equitativamente no son los bienes materiales, sino el poder y la participación en los asuntos de estado directamente, sin intermediarios, una configuración similar a la democracia de la Atenas de Pericles pero más efectiva en la resolución de problemas, añadiendo un verdadero cuarto poder al sistema de pesos y contrapesos de Montesqieu. Se puede ver el germen de este tipo de configuración en las redes sociales y la blogósfera, así que únicamente es cuestión de sistematizar este enorme poder de cómputo mental y creatividad para el beneficio de los estados y del género humano. Verá: de cualquier manera el poder colectivo tomará más fuerza a medida que transcurra el tiempo. Solo es asunto de inventar el embalse adecuado para la contención de ese gran río de ideas. Pienso que los países que mejor lo aprovechen alcanzarán rápidamente un estado de bienestar colectivo.

Si aquí repito esa idea es porque espero que poco a poco vaya permeando la mentalidad de la sociedad, hasta el punto de que los políticos se hagan consientes tanto de su factibilidad como de sus bondades. Claro, si la idea fracasara y en lugar de prosperidad provocara la aceleración de la destrucción del género humano, usted podrá culparme, pero afortunadamente ya no existiré para escuchar sus reproches.

Bien, me alegro que la pescada ya esté de nuevo moviendo alegremente su colita. Hoy, el toque de queda es a las nueve y hay un estado de relativa calma, así que a pasar el tiempo con la familia. Saludos.

Para una mejor idea del funcionamiento de mi propuesta de redes democráticas lea: http://lahondurasvaliente.blogspot.com/2009/06/honduras-bajo-la-lupa-las-redes.html,

viernes, 25 de septiembre de 2009

Un presidente de brillante actuación

Al sur de la frontera
Dr. Edwin Francisco Herrera Paz
Un amigo mío llegó ayer al gimnasio un poco decaído, sin muchas ganas de hacer ejercicio. Después de que se anunciara el toque de queda para las 7 de la noche mi amigo confesó: “mi mujer se fue con la resistencia”. Toda las personas allí presentes hicieron un gesto lastimero, como compadeciéndose del pobre hombre. Ignoro los motivos por los que la mujer se le fue con la resistencia, pero pienso que por que ya no estaba dispuesta a aguantar a un marido tan golpista. Y es que este conflicto ha dividido familias y amistades en dos bandos: los golpistas o camisitas blancas vs. Los melistas o resistentes, aunque según mis sondeos en las redes sociales y otros medios, al parecer los golpistas son  mayoría.

Hay que reconocer, sin embargo, que decir que se es de la resistencia no deja de tener cierto embrujo, dado por la pertenencia a un grupo escogido, que ya se creía en vías de extinción, que es guiado por un propósito casi mesiánico para cuyo cumplimiento no importan los medios utilizados. Para darles un ejemplo, un viejo amigo perteneciente a la resistencia me dijo al leer uno de mis artículos: “Edwin, pensá. No repitas como loro lo que dicen los demás. Es fácil hacer un análisis”. La intención de mi amigo era que a mí tambien me envolviera esa iluminación o revelación instantanea que da la ideología socialista.

Heroe Maxicano
El presidente Hugo Chávez dijo ayer desde la ciudad de Nueva York: “Es un vaquero, tipo Pancho Villa, valiente. Me dijo: Si muero, muero, pero yo voy a entrar a Tegucigalpa”, refiriéndose a su conversación con Manuel Zelaya. Es claro que es preferible la muerte a aguantar las exigencias del presidente Hugo Chávez. Por ejemplo, fíjese usted en los gestos del titular de Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela cuando Chávez se dirige a él. Desde que el presidente comienza a hablar, Nicolás Maduro comienza a sacudir la cabeza velozmente hacia atrás y hacia adelante en señal de aprobación. Sus facies parecen las de un perrito apaleado pero fiel. Manuel Zelaya por su parte no tiene el temperamento para aguantar el trato que les da Chávez a sus subalternos, por lo que prefiere una embajada por cárcel, o aún la muerte, que aguantar al presidente Chávez.

Chávez dice que Zelaya es un vaquero tipo Pancho Villa, pero al presidente se le olvida que los vaqueros son del Imperio. En México hay charros, rancheros o mariachis, pero no vaqueros. Es lógico si consideramos que el presidente tiene una fijación, una especie de fascinación con el Imperio. Es más, actualmente ya se dejan ver los atisbos de una relación amorosa sadomasoquista (Chávez es el sádico y Obama el masoquista). Fíjese usted si no es así. Aquí en Honduras, Enrique Ortez Colindres se refirió a Obama como “el negrito”, y tuvo que pedir disculpas en 5 idiomas, y aun así se vio en la necesidad de renunciar a su cargo de Canciller. Por otro lado, Chávez se da el lujo de llamar al presidente de los EUA hipócrita, de doble cara, y nada pasa. Pensándolo bien, la relación de Obama con Chávez no es solo sadomasoquista, sino la de una sexoservidora con su cliente: petróleo a bajo precio a cambio de “favores”.

Mandatario venezolano
Pocas veces en la vida he podido presenciar hazañas como las de Hugo Chávez. Es extremadamente difícil hablar una cascada de sin sentidos de una manera tan elegante y atractiva que el auditorio incluso se pare a ovacionar al protagonista. El presidente habla de cosas de las que no sabe mucho, como el cambio climático, y urge al presidente Obama a tomar cartas en el asunto. Los habitantes del mundo no queremos que un mandatario se pare en el pódium de las Naciones Unidas a decirnos que Groenlandia o los polos se están derritiendo debido a las emisiones de dióxido de carbono. Eso ya lo sabemos. Lo que queremos es la exposición de soluciones para ese y otros peligros inminentes a los que se enfrenta el género humano. 

Pero Chávez sí hizo un intento de ofrecer una solución al cambio climático. Le dijo a Obama que como la polución del mundo era provocada por el capitalismo, entonces Estados Unidos debía unirse a su “eje del mal”, y hacerse socialista. Ahora resulta que la solución a la catástrofe climática que se nos avecina es el socialismo del siglo XXI. Se le olvida a Chávez que uno de los países con las mayores emisiones de CO2 en el mundo es China, un país socialista.

Pero si Chávez no se caracteriza por tener tacto en su discurso, sí por sus dotes histriónicas. Como dije anteriormente, esto se evidencia por la capacidad de hablar bagatelas y a pesar de eso ser frenéticamente aplaudido por el público. También, es la estrella principal en el documental de Oliver Stone “Al Sur de la Frontera”. De todos es conocida la inclinación de Stone a utilizar en sus creaciones personajes con tendencias psicopáticas, y si no recuerde usted su película “Natural born killers”. Su reciente producción no hace más que confirmar esta aseveración. Propongo un premio Oscar para el mandatario, por su brillante actuación.

Dijo el presidente Chávez que Zelaya burló los satélites, y además la fuerte seguridad que mantiene el ejército de Honduras para poder llegar a la Embajada de Brasil. A mí me parece, que más que a la de un valiente vaquero, la acción de Zelaya se asemeja a la de los miles de compatriotas anónimos que viajan cada año hacia el Imperio ilegalmente en busca del sueño americano. Propongo que para evitar ese tipo de burlas en el futuro (que las personas entren “mojadas” a Honduras), construyamos un alto e imponente muro en nuestras fronteras. Además, deberemos mejorar nuestra flotilla de satélites geoestacionarios de espionaje. San se acabó. Asunto arreglado. Pero para el ex presidente Zelaya, presiento que no habrá muros ni satélites que lo paren de su huida del presidente Chávez. Por eso dijo: “Restitución, patria o muerte” (pero no me manden a aguantar más al presidente Chávez, pensó).

Las contradicciones en esta crisis política están a la orden del día. El presidente de Brasil dice que él nada tuvo que ver con el hecho de que Zelaya se refugiara en su embajada en Honduras. Pero Zelaya dice lo contrario: que antes de llegar a la embajada se comunicó con Lula da Silva quien le indicó que considerara la embajada como su casa, “señor presidente”. Y como el ex presidente se ha dedicado a mentir, es difícil creerle, aunque queda la duda: ¿Quién miente en este caso? ¿Zelaya o Lula?

Bien, espero que este conflicto se solucione pronto para que la familia hondureña vuelva a estar unida, y para que regrese la resistente esposa de mi amigo y se sienta más contento. Saludos.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Las mejores soluciones al actual conflicto político de Honduras

Los “hot dogs”, o “perros calientes” son una comida popular en “El Imperio”, pero intuyo que en Honduras se pondrá de moda en los próximos días.

Yo soy partidario de que resolvamos la crisis política en Honduras por las buenas. Me extraña que el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, Ganador de un premio Novel, se le haya ocurrido una solución tan insulsa como el pacto de San José. El asunto es que todos los hondureños estamos sufriendo con un toque de queda que nos obliga a tener casa por cárcel sin haber cometido ningún delito.

Con el asunto de la comida, hoy se levantó temporalmente el toque de queda para que todos los ciudadanos nos podamos abastecer. El problema es que en los supermercados se vendió racionado, y el toque ahora tendrá una duración indefinida. Mientras, yo en mi casa tengo tres boquitas que más bien parecen una legión gigantesca de termitas evolucionadas, de tanto que consumen.

Mi sobrina me dio una solución en caso de prolongarse el toque y nos quedemos sin alimentos. Dice mi sobrina que en caso de emergencia, podríamos comernos a los cuatro perros que tenemos en la casa. Pero yo le digo que de los cuatro solo uno es comestible: Hunter, el labrador, que está gordito y lozano. La perra Peni, que es una boxer pero bien rara, sin pelo, tiene la apariencia de ser venenosa. Los dos perros pequeños, que tienen de chihuahua, de terrier y de otras mil cosas no especificadas, no tienen suficiente carne ni para medio plato. Además se ven talludos.

Bueno, ya dejo las delicias gastronómicas de emergencia para proponer soluciones reales al conflicto político. La primera es construir en Tegucigalpa un ring de box en tiempo record, y acordar una pelea de 15 rounds o a muerte (lo que suceda primero) entre Mel y Micheleti (que de ahora en adelante llamaré Mich, suena más artístico). El ganador (o sea, el que quede vivo) se quedaría entonces con la presidencia. La mayoría de mis amigos de facebook le apuestan a Mich, pero veamos las cualidades y debilidades de cada uno.

Mel es alto, y además luce un tremendo bigote que es evidencia de altos niveles de testosterona. Puntos a favor. Sin embargo, ya fue duramente golpeado por Mich el 28 de junio, y recordemos que el que golpea primero golpea dos veces. Además, el ex presidente se ve demacrado por la ausencia de su media naranja (o más bien un quinto de naranja, tomando en cuenta a las otras tres, incluyendo la oficial) que dejó en Nueva York. Tampoco ha podido oír su narcocorrido favorito, “El jefe de jefes” que lo anima y le da fuerzas para seguir adelante.

Mich por su parte, ya se ve viejito (punto en contra), pero es más robustito y tiene antecedentes de ganar combates a mano limpia en el Congreso Nacional. Por otro lado, es un hombre curtido en las agresivas calles de la ciudad de El Progreso, cuando cobraba pasaje en sus unidades de transporte. Es decir, tiene más experiencia en técnicas de boxeo que Mel, por lo que la mayoría de las apuestas le favorecen.

Yo creo que lo mejor para Honduras sería que ninguno sobreviviera a la contienda. Que ambos sufrieran un paro cardiaco. En Honduras, todos estaríamos de luto, tanto los “camisitas blancas” como los “resistentes”, pero nuestros problemas se acabarían. El mundo podría estar más tranquilo, pues los mandatarios de los países no sentirían la presión de tomar una posición. Ya no tendría sentido el bloqueo de las ayudas internacionales, ni quitarle visas a la gente. Piénselo. Si uno de los dos muere, el conflicto ocasionado por la oposición no cesaría, así que a los hondureños nos convendría que ambos defuncionen (¿existe ese verbo?) en el combate.

Bueno, esa es una buena solución. La otra solución que propongo es un partido de futbol de la selección de Honduras contra la de Brasil. Si nosotros ganamos, sacan a Mel de la embajada para apresarlo. Si gana Brasil, entonces que se queden ellos con Mel y se lo lleven al Brasil (de cualquier forma ganamos, pero usted no cuente). Eso sí, como ventaja para nosotros el partido se deberá efectuar en el estadio Olímpico de San Pedro Sula, ya que el problema es de Honduras y ellos son los que andan de sampalimones (metidos). No sea usted pesimista, que ya le ganamos a Brasil en la Copa América efectuada en Colombia.

Bueno, de tanto desvariar ya me dio hambre. Voy a bajar a la cocina a ver si me preparo mi “perrito caliente”. Saludos.

martes, 22 de septiembre de 2009

El Jefe de Jefes llega a la Embajada

La privación de la libertad es un trago ácido para las personas que estamos acostumbradas a deambular libremente por la ciudad. Siento unos impulsos enormes por comprar mi capuchino diario, que me reanima y me prepara para enfrentar el día. No puedo ir a dar ni un paseo por el mall, como buen “camisita blanca”. El toque de queda afecta la economía pero también la psiquis de los ciudadanos. Como el día de ayer dicho toque de queda fue impuesto de un momento a otro, la gente no pudo comprar sus provisiones. Me preocupa que se nos agote la comida en la casa, por lo que deberemos racionarla, algo que no está del todo mal considerando las libritas que he subido en los últimos días.

Claro, yo podría salir, pues soy médico. Pero, ¿a qué? ¿A contemplar la ciudad vacía? Y tampoco me arriesgo, no sea que termine en un campo de concentración. Los de la resistencia dicen (lo escuché en radio Progreso) que estos campos solo se pueden igualar al de Auschwitz en tiempos de la Segunda Guerra Mundial y Alemania Nazi por las tremendas y desmedidas torturas a las que son sometidos los detenidos, como escuchar propaganda política de los candidatos presidenciales Elvin Santos y Pepe Lobo por altoparlantes.

Y todo este lío se originó el día de ayer cuando Manuel Zelaya Rosales regresó a Honduras y se refugió en la embajada de Brasil. Dijo Mel que pudo pasar la frontera pagando un jugoso soborno con petrodólares. Dice el ex presidente que se vino “mojado”, lo que demuestra que Honduras es tan grande en estos momentos que la dirección del flujo migratorio cambió, y el ex mandatario viene en busca del sueño Hondureño. No se sabe qué disfraz utilizó para no ser reconocido en el trayecto, pero es probable que haya tenido que desprenderse temporalmente de su sombrero, con el que en la actualidad vive en estado de simbiosis manteniendo un rico, complejo y diverso micro ecosistema.

Mientras tanto Micheleti dice que a Mel ya le tienen preparada la bienvenida, con una cómoda celda presidencial en la Penitenciaría Central, con televisión por cable incluida. Algunos gobiernos de la Unión Europea continúan sin reconocer el gobierno de Micheleti, y presionan por la negociación y la restitución de Zelaya. La titular del Departamento de Estado de los Estados Unidos, quien luce una linda y delicada cornamenta debido a las andanzas de su marido, también presiona por la restitución.

Parece ser que el Petróleo de Chávez Frías es solo la punta del Iceberg en la alineación de los países con el socialismo del siglo XXI. En el actual conflicto político hondureño priman los intereses de grupos económicos en busca de monopolios mundiales, para quienes el socialismo es ventajoso. Mientras en el siglo pasado los grupos de poder económico encontraron en el libre mercado un nicho en el cual pudieron prosperar, hoy en día las alianzas con dictadores se vislumbra conveniente, ya que estos últimos pueden imponer en sus respectivos países los productos que la población consume. Este estado de cosas lo podemos inferir a partir de las posturas de los medios de comunicación de dominio mundial, como Microsoft Network y CNN.

Pero si la postura de las grandes cadenas mediáticas mundiales es evidente debido al giro de su actividad, hay otros grupos que se mantienen tras bambalinas, invirtiendo cuantiosas cantidades de dinero en el afán expansionista de Chávez y el socialismo. Los imperios económicos que se posicionen en las nuevas economías socialistas tendrán asegurado un monopolio duradero debido a la perpetuación en el poder de los gobernantes caudillos, por lo que hoy en día eso grupos mantienen alianzas estratégicas con los políticos socialistas. Para estas alianzas el bienestar de las mayorías queda en segundo plano, pero se utiliza como un efectivo caballo de batalla.

En estos momentos los grupos que lideran la resistencia están emplazando a sus miembros a armarse. Manuel Zelaya quiere un derramamiento de sangre de hondureños (mientras no sea la de él) y llama a desobedecer el toque de queda. Al ex presidente se le ve demacrado, y ahora que han cortado la electricidad en la embajada de Brasil, no puede escuchar los narcocorridos que tanto lo animan.

A mí me sigue preocupando lo de la comida. En mi clínica, por ejemplo, los empleados piensan que estarán encerrados por varios días y tendrán que recurrir a la misma solución que los supervivientes de los Andes. Olga, la enfermera, está preocupada ya que al ser la mejor provista de carnes (léase gordita) sería la primera en ser comida. Esperemos no llegar a esos extremos. Saludos.

sábado, 19 de septiembre de 2009

De Alturas para el mundo: la Noocracia Democrática

Corre el año 2033. En el año 2011 los dirigentes políticos de la Honduras de entonces decidieron probar una idea que a alguien (ahora en el anonimato) se le ocurrió, pero debo decir que a ese héroe anónimo le debe el mundo, y en especial de nuestro país, por su actual prosperidad. La idea fue simple, y fue llamada “Red democrática”. Aunque ha transcurrido mucho tiempo desde la versión 1.0, la idea básica continúa sin cambios. Funciona como describo a continuación.

Para la implementación de la primera versión se creó un software que utilizaba los algoritmos de las redes sociales primitivas complementados con los de los motores de búsqueda en la red de aquel entonces (Internet 2. Ahora utilizamos la red holográfica llamada Internet 10). Para cada problema que enfrentaba el estado, se creaba una página con su descripción y detalles. Luego el problema entraba a una fase de creación en la que todos los ciudadanos con una conexión a internet podían participar, aunque generalmente tomaba la batuta la legión de expertos en el tema en cuestión. Como el formato era abierto, todos podían participar, incluso los extranjeros. Los ciudadanos ofrecían ideas para la solución del problema, las que eran listadas y podían ser vistas por cualquier persona.

Después de esta fase, que usualmente duraba unas semanas, continuaba la fase de votación. En esta, toda persona podía escoger una de las ideas listadas para la solución del problema, la que consideraba como la mejor, y la enviaba a todos sus “contactos”. Un individuo podía tener todos los contactos que quisiera. El envío de la idea a un contacto representaba un voto. Un ciudadano solo podía enviar una de las ideas a los contactos una sola vez, aunque la persona podía tener todos los contactos que quisiera. Ahora bien, una persona que era contacto de otra recibía generalmente muchas ideas, de diferentes contactos, pero reenviaba a sus propios contactos la idea que consideraba como la mejor. De esa manera, las ideas mejor acogidas en la red democrática sufrían una especie de amplificación, obteniendo un gran número de votos. Las ideas entonces se colocaban en una lista, ordenadas por número de votos. La idea más votada era la primera. Esta lista entonces estaba a disposición del mandatario para ser implementada. Invento más simple, difícil de encontrar.

Al inicio, la decisión de implementar una idea más votada era del mandatario (presidente, alcalde, etc.), pero al conocerse la enorme efectividad del sistema implementado en la solución de problemas, unos años después de su creación, el Congreso de nuestro país dispuso su obligatoriedad de cumplimiento, pasando una gran parte del poder de la nación a la colectividad. El invento en cuestión fue simple pero ingenioso, y basado en un campo del saber denominado “inteligencia colectiva”. La inteligencia colectiva basada en la red democrática demostró un tipo nuevo de sabiduría, una característica emergente del nuevo sistema creado.

Le pongo algunos ejemplos de decisiones sabias surgidas de la colectividad. En 2012 la colectividad decidió que los restaurantes de comida rápida debían continuar sin pagar impuestos, pero en cambio, tenían que construir un aula escolar cada año completamente equipada con computadoras y conectada a la red. Una cosa llevó a la otra. Pronto, muchas escuelas tuvieron conectividad. Los niños comenzaron a utilizar las herramientas informáticas de maneras tan creativas que se decidió que ellos también participarían en las redes democráticas, y muchas de las soluciones más creativas a los problemas de estado hoy en día son propuestas por los niños.

La colectividad también logró combatir la corrupción y disminuir el gasto público mediante la creación de auditorías trimestrales realizadas por prestigiosas compañías internacionales, que vigilaban que los fondos fueran utilizados donde se necesitaran y que se cumpliera el mandato de la colectividad. Hoy en día ya no necesitamos dichas auditorías, pues en unos pocos años el sistema fue completamente saneado. Actualmente se recuerdan con asombro los días en los que los fondos de la nación eran despilfarrados o pasaban a manos privadas. En 2025, una crisis de patriotismo causó que se propusiera un cambio de nombre del país, y la Honduras de entonces es ahora la nueva “Alturas”.

En la actualidad continuamos observando la evolución del sistema de redes democráticas. Los ciudadanos se han especializado en su función dentro de la red, y las mentes brillantes de la sociedad en cada campo se encargan de proponer ideas, incluyendo los niños, convirtiendo al sistema en una especie de noocracia democrática que se automejora día con día. Las redes democráticas al presente parecen tener conciencia y voluntad propias, como si de un hiperorganismo se tratara. Aun contamos con elecciones para nuestros mandatarios, pero estos solo se encargan de administrar y cumplir con la voluntad de la colectividad.

Después de su instauración en Honduras, las redes democráticas se hicieron populares en otros países, y actualmente el mundo cuenta con su propia red democrática en la que se ventilan asuntos de importancia global. Cada día que pasa las redes democráticas nos ofrecen nuevas sorpresas. El poder del mundo ya no se encuentra en unas cuantas manos, sino que está distribuido uniformemente entre todos los ciudadanos de la tierra, que piensan y actúan al unísono hacia un mejor macroambiente para la humanidad. El género humano ha demostrado su cuasi infinita capacidad creativa. Mientras tanto los humanos continuamos viviendo nuestras vidas igual que hace 20 años en nuestros ambientes cotidianos, aunque debo decir, con mejoras substanciales en la calidad de vida. También, quedaron atrás los tiempos de los viejos debates sobre los mejores sistemas de gobierno.

Gracias a las redes democráticas hemos redefinido el concepto de “estado”, y las naciones han progresado hacia un nuevo tipo de economía en la que un país o estado se especializa en suplir una necesidad particular de los demás, aumentando la complejidad de los sistemas productivos y económicos, simplificando las labores de producción y aumentando la interdependencia e interrelaciones entre naciones, lo que dificulta y hace poco convenientes los conflictos bélicos, aunque todavía los hay, la mayoría propiciados por los grupos de crimen organizado, ahora a escala global. Desafortunadamente estos grupos, por cuenta propia, pronto comprendieron las ventajas de la inteligencia colectiva, y encontraron maneras de utilizarla para sus malévolos fines.

La red democrática mundial trabaja en estos momentos sobre la mejor forma de mandar una nave espacial no tripulada a la Cercana del Centauro. Mañana le cuento los resultados. Que tenga un feliz día.

jueves, 17 de septiembre de 2009

La noocracia democrática y la prosperidad de los Garífunas de Alturas

Por: Edwin Francisco Herrera Paz

Corre el año 2033. En el año 2011 los dirigentes políticos de la Honduras de aquel entonces decidieron probar una idea que a alguien (ahora en el anonimato) se le ocurrió, pero debo decir que a ese héroe anónimo le debe el mundo, y en especial nuestro país, por su actual prosperidad. La idea fue simple, y fue llamada “Red democrática”. Aunque ha transcurrido mucho tiempo desde la versión 1.0, la idea básica continúa sin cambios. Funciona como describo a continuación.

Para la implementación de la primera versión se creó un software que utilizaba los algoritmos de las redes sociales primitivas complementados con los de los motores de búsqueda del internet de aquel entonces (Me refiero a Internet 2. Ahora utilizamos la red holográfica Internet 10). Para cada problema que enfrentaba el estado o una ciudad se creaba una página con su descripción y detalles. Luego, el problema entraba a una fase de creación en la que todos los ciudadanos con una conexión a internet podían participar, aunque generalmente tomaba la batuta la legión de expertos en el tema en cuestión. Como el formato era abierto, todos podían participar, incluso los extranjeros. Los ciudadanos ofrecían ideas para la solución del problema, las que eran listadas y podían ser vistas por cualquier otra persona. 

Esta primera fase, que usualmente duraba unas semanas, era seguida de una segunda cuyo propósito era  votación. En esta, toda persona podía escoger una de las ideas listadas para la solución del problema, la que consideraba como la mejor, y la enviaba a todos sus “contactos”. El envío de la idea a un contacto representaba un voto. Un ciudadano sólo podía enviar una de las ideas a los contactos una sola vez, aunque la persona podía tener todos los contactos que quisiera.

De esa manera, las ideas mejor acogidas en la red democrática sufrían una especie de amplificación, o más bien de dispersión viral, obteniendo un gran número de votos. Las ideas entonces se colocaban en una lista, ordenadas por número de votos. La idea más votada era la primera. Esta lista entonces estaba a disposición del mandatario para ser implementada. Invento más simple, difícil de encontrar. 

Al inicio, la decisión de implementar o llevar a la práctica la idea o solución más votada era del mandatario (presidente, alcalde, etc.), pero al conocerse la enorme efectividad del sistema de red democrática en la solución de problemas, unos años después de su creación, el Congreso de nuestro país dispuso su obligatoriedad de cumplimiento, pasando una gran parte del poder de la nación a la colectividad. El invento en cuestión fue simple pero ingenioso y basado en un campo del saber denominado “inteligencia colectiva”. La inteligencia colectiva basada en la red democrática demostró un tipo nuevo de sabiduría, una característica emergente del nuevo sistema creado. 

Le pongo algunos ejemplos de decisiones sabias surgidas de la colectividad. En 2016 la colectividad decidió que los restaurantes de comida rápida debían continuar sin pagar impuestos, pero en cambio, tenían que construir un aula escolar cada año completamente equipada con computadoras y conectada a la red. Una cosa llevó a la otra. Pronto, muchas escuelas tuvieron conectividad. Los niños comenzaron a utilizar las herramientas informáticas de maneras tan creativas que se decidió que ellos también participarían en las redes, y muchas de las soluciones más creativas a los problemas de estado hoy en día son propuestas por los niños.

La colectividad también logró combatir la corrupción y disminuir el gasto público mediante la creación de auditorías trimestrales realizadas por comités rotatorios formados por ciudadanos ejemplares y sin tacha, los cuales vigilaban que los fondos fueran utilizados donde más se necesitaran y que se cumpliera el mandato de la colectividad. Hoy en día ya no necesitamos dichas auditorías pues en unos pocos años el sistema fue completamente saneado. Actualmente se recuerdan con asombro los días en los que los fondos de la nación eran despilfarrados o pasaban a manos de particulares.

En 2025, una crisis de patriotismo causó que se propusiera un cambio de nombre del país, y la Honduras de entonces es ahora la nueva “Alturas”. En la actualidad continuamos observando la evolución del sistema de redes democráticas. Los ciudadanos se han especializado en su función dentro de la red y las mentes brillantes de la sociedad en cada campo se encargan de proponer ideas, incluyendo los niños, convirtiendo al sistema en una especie de noocracia democrática que se automejora día con día. Las redes democráticas al presente parecen tener conciencia y voluntad propias, como si se tratara de un superorganismo. Aun contamos con elecciones para nuestros mandatarios, pero estos solo se encargan de administrar y cumplir con la voluntad de la colectividad. 

Después de su instauración en la antigua Honduras el concepto se hizo popular en otros países, y actualmente el mundo cuenta con su propia red democrática en la que se ventilan asuntos de importancia global. Por ejemplo, la red democrática mundial trabaja en estos momentos sobre la mejor forma de mandar una nave espacial no tripulada a la Cercana del Centauro.

Cada día que pasa las redes democráticas nos ofrecen nuevas sorpresas. El poder del mundo ya no se encuentra en unas cuantas manos, sino distribuido uniformemente entre todos los ciudadanos de la tierra que piensan y actúan al unísono hacia un mejor macroambiente para la humanidad. El género humano ha demostrado su cuasi infinita capacidad creativa.

Mientras tanto los humanos continuamos viviendo nuestras vidas igual que hace 20 años en nuestros ambientes cotidianos, aunque debo decir, con mejoras substanciales en la calidad de vida. También, quedaron atrás los tiempos de los viejos debates ideológicos sobre los mejores sistemas de gobierno.

Gracias a las redes democráticas hemos redefinido el concepto de estado y las naciones han progresado hacia un nuevo tipo de economía en la que un estado se especializa en suplir un pequeño puñado de necesidades particulares de sus homólogos, aumentando la complejidad de los sistemas productivos y económicos, simplificando las labores de producción y aumentando la interdependencia e interrelaciones entre naciones lo que dificulta y hace poco convenientes los conflictos bélicos. Aunque todavía los hay, la mayoría propiciados por los grupos de crimen organizado ahora operando a escala global. Desafortunadamente estos grupos, por cuenta propia, pronto comprendieron las ventajas de la inteligencia colectiva y encontraron maneras de utilizarla para sus malévolos fines. 

En Alturas, hace más de 18 años la directiva del futbol de la nación pasó de manos de individuos papiraceos que en aquel entonces parecía que manejarían el deporte por toda la eternidad, a la colectividad. El sistema de redes democráticas (implementado unos cinco años después de la crisis política del 2009) le permitió a la nación tomar decisiones sabias basadas en la inteligencia colectiva e impulsó al país en la ruta de los más desarrollados, siendo actualmente una economía emergente de las Américas.

Las redes han hecho posible la explotación de la creatividad de todos los ciudadanos, encontrando soluciones ingeniosas y efectivas para todos los problemas apremiantes. No es extraño encontrar por las calles de cualquier ciudad de Alturas a niños que se pueden comunicar en 3 o más idiomas. Los enfrentamientos entre bandas del crimen organizado aun son un problema, pero la colectividad está trabajando en la implementación de ideas para combatirlo. La corrupción pública ha descendido a niveles tan bajos que se nos ha calificado como uno de los países menos corruptos del mundo.

Me encuentro en una pequeña comunidad del Caribe de nuestro país. La conozco muy bien, pues hace aproximadamente 30 años que trabajo con los Garífunas en diferentes aspectos de su cultura y genética. Sigue siendo una comunidad pequeña, pero se puede observar un cambio drástico en el tiempo transcurrido. Hace unos 15 años, la colectividad se dio cuenta del maravilloso tesoro que poseemos en nuestras costas. Para comenzar, a alguien se le ocurrió que el acerbo genético de los garífunas en cuanto al desempeño físico debía ser privilegiado, pues históricamente nuestras selecciones de futbol no han sido una muestra representativa de las razas y etnias del país. Mientras la población Garífuna constituye menos del 5% de la población del país, los integrantes de las selecciones de futbol pertenecientes a dicha etnia corresponden a más del 40%, lo que claramente es evidencia de un factor genético. Debíamos aprovechar ese hecho. La idea se difundió y amplificó en la red democrática, y pronto se idearon formas diferentes de explotar la potencia física Garífuna.

Hace 16 años se implementó un proyecto de grandes dimensiones encaminado a la formación de futbolistas desde la niñez, creando escuelas de futbol profesionales a lo largo de las más de 50 comunidades Garífunas distribuidas en las costas. Las escuelas se encargan desde entonces de proveer a los pequeños con lo indispensable en sus prácticas, así como de vigilar su alimentación y su adecuada educación formal. Hace ya 10 años que la primera generación de futbolistas formados en estas escuelas sorprendió al mundo. Los jugadores pasaron a formar parte de los equipos locales, y de la noche a la mañana, el futbol hondureño se igualó en desempeño al de las grandes potencias tradicionales. Como el proyecto era manejado en parte por personas de las comunidades, pronto las organizaciones comunitarias garífunas pudieron exportar a sus más brillantes jugadores que se pueden encontrar en todos los clubes europeos, obteniendo jugosas ganancias, parte de las cuales fueron reinvertidas en las escuelas.

Hoy, gracias a la nueva prosperidad de la que gozan las comunidades, se encuentra en marcha un gigantesco proyecto de ecoturismo a lo largo de la costa, que se espera que genere miles de millones de dólares al año. El proyecto hará que otros centros turísticos de la región se vean como verdaderas nimiedades. Y aquí estoy, parado frente al mar, observando la puesta de sol, mientras a mis espaldas la maquinaria pesada trabaja a sol y asombra en el que será un hotel de lujo, el más lujoso de Centroamérica.

Los estudios genéticos hoy en día nos permiten conocer las potencialidades de los seres humanos para orientarlos a las actividades laborales para la que mejor están capacitados, y me encuentro en la comunidad realizando pruebas para la aceptación de los niños de 3 años en las escuelas de futbol. Desde luego, desde un principio se pensó en la posible discriminación genética (la discriminación genética ha substituido a la discriminación racial en todo el mundo), y a todos los niños se les realiza una secuenciación completa de su genoma y se le brinda consejería a los padres sobre las posibles opciones laborales del pequeño.

Pero las redes democráticas han propiciado la prosperidad de otras etnias del país, aprovechando sabiamente sus acerbos genéticos y culturales en la implementación de industrias con un alto valor agregado y propiciando un desarrollo basado en los últimos estudios científicos en los que se aplica el conocimiento de los ecosistemas y otros sistemas complejos al desarrollo urbanístico y a la explotación verdaderamente sostenible de los recursos.

Parece mentira, pero todo esto se lo debemos a un grupo de hombres y mujeres que supieron sacar provecho de una crisis política, tomando decisiones sabias, impulsando ideas para el mejoramiento del engranaje gubernamental que posteriormente fueron útiles para combatir la corrupción y mejorar la educación, que supieron ceder a sus propios intereses en beneficio de las generaciones venideras, que dejaron atrás los caprichos infantiles y las diferencias para acudir a la mesa de diálogo.

Estos altureños que vivieron en un momento clave de nuestra historia, son considerados hoy en día como héroes nacionales. Es probable que nuestro país no experimente de nuevo un período de florecimiento como el registrado en aquel entonces. Por eso decimos ahora: gracias compatriotas. La posteridad les ha hecho justicia.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Hacia el “Sueño Hondureño”

Abraham Lincoln, decimosexto presidente de los Estados Unidos, fue un hombre con un carácter tan tranquilo que se podría tildar como fuera de lo común. Nunca tuvo un regaño para sus hijos, y si usted cree que su mujer lo hostiga es que no conoció a la señora Lincoln. Abraham Lincoln aguantaba los continuos regaños de su mujer de manera formidable. Pero lo que más me llama la atención de la historia del presidente Lincoln es la manera en la que parece que toda su vida y trayectoria fueron creadas para un propósito: la abolición de la esclavitud y la reunificación del pueblo norteamericano. Luego de la guerra de secesión, una de las más sangrientas que haya visto la historia de la humanidad, Lincoln mantuvo la unidad entre el norte y el sur, difícil tarea cuando se consideran las diferencias de opinión y actitudes en apariencia irreconciliables.

Y es que el pueblo norteamericano ha apostado por la unidad desde sus comienzos. Los Estados Unidos anterior a la independencia de Inglaterra constaban de 13 colonias (hoy estados). Ante las presiones de los ingleses, los dirigentes de algunas de estas colonias eran partidarios a “seguirles el juego” a los ingleses y evitar la confrontación. El resto, en cambio, era partidario a la rebelión con miras a independizarse. El resultado final obvio sería la separación de las colonias en dos grupos. Estas diferencias irreconciliables fueron resueltas por un grupo de hombres, entre los que se encuentran John Adams y Thomas Jefferson (segundo y tercer presidente de los Estados Unidos, respectivamente) que comprendieron que en la unidad está la fuerza, y persuadieron a los demás de desistir de la separación, y a continuación, cualquiera fuera la decisión final del grupo, a que se mantuvieran unidos. Así, la base de la grandeza de ese país como potencia militar y rector de la política mundial se ha basado desde un principio en la unidad indisoluble de sus estados.

Ese refrán que dice “en la unidad está la fuerza”, no se debe tomar a la ligera. Significa más que: “una fuerza mas otra fuerza es igual a dos fuerzas”. En realidad significa: “una fuerza más otra fuerza es igual a un nuevo tipo de fuerza”, con propiedades y características nuevas y capaz de solucionar problemas que las fuerzas no habrían podido solucionar por separado. En otras palabras, el resultado de la unión es más que la suma de sus partes. Así funciona la vida, así funciona la iglesia, así funcionan las organizaciones. Su hígado, por ejemplo, no sería nadie sin la ayuda de su corazón, que le bombea sangre, y el corazón no sería nadie sin el hígado, que lo libera de substancias tóxicas. Por mucho que a usted le guste el corazón porque lo hace evocar situaciones románticas, es elegante, rítmico y tiene bonita forma, mientras el hígado es más bien feo y solo le guste a usted para comérselo encebollado, el primero sin el segundo no es nada.

Usted que es médico, es una persona muy habilidosa, tanto que a veces se cree la mamá de Tarzan, o tal vez un semidiós enviado a la tierra para rescatar a la humanidad de las garras de los innumerables bichos y otras desgracias físicas que nos acechan a cada momento. Sin embargo cuando se le arruina el carro queda completamente a merced del mecánico, y llega donde este como un sumiso corderito para que no le dé muy duro en la nuca. Lo mismo sucede con el mecánico cuando se enferma y llega donde el médico, y cuando ambos están en apuros legales ambos van a dar a las fauces inmisericordes del nompus ultra (la mera mecambrea) de los profesionistas: El Abogado. ¿Ve? La dependencia en otros que la actual vida de sociedad nos ha impuesto hace que usted, por muy diestro e inteligente que sea en su profesión, tenga probabilidades remotas de sobrevivir en una isla desierta. Esta (la simplificación de los elementos) es una característica intrínseca del aumento en la complejidad de las sociedades humanas, pero también de todos los sistemas vivos. El término correcto según la teoría de sistemas es “interdependencia”.

Pero, ¿a qué viene todo este bla bla sobre la unidad y la interdependencia? Le explico. “Polarizado” es un término utilizado para designar un procedimiento que consiste en obscurecer los vidrios de un carro con dos propósitos fundamentales: proteger el interior del vehículo del calor abrasador de San Pedro Sula, y evitar que a usted lo identifiquen en la calle cuando anda en alguna picardía. Una segunda acepción del término podría ser: “un individuo fuertemente inclinado y comprometido en una de dos posiciones políticas”.

En la actualidad, Honduras pasa por una crisis política en donde existe una fuerte polarización. Por un lado, están aquellos que creen que la destitución y expulsión de Manuel Zelaya Rosales fue un hecho necesario, pues de lo contrario se efectuaría una encuesta ilegal que conduciría irremisiblemente al continuismo presidencial, al ingreso de Honduras al bloque de países que forman parte del llamado “socialismo del siglo XXII”, y al dominio hegemónico del presidente bolivariano Hugo Rafael Chávez Frías, y por lo tanto llaman a lo ocurrido “sucesión presidencial”. Por otro lado, están aquellos que condenan lo que llaman “golpe de estado”, y sobra mencionar aquí la connotación de dicho término y todo lo que implica. Ambos bandos están tan fuertemente comprometidos con sus posiciones que se podría decir que tienen “diferencias irreconciliables”. Desde luego, la verdad no pertenece a ningún ser humano o grupo en particular, y es así como ambos bandos esgrimen argumentos convincentes, basados en sus intereses particulares o ideológicos.

Pero el tema de la actual crisis política en Honduras representa, en la práctica, solo un pequeño porcentaje de los problemas que agobian a nuestro pueblo, y que continuarán agobiándolo si no establecemos medidas firmes, basada en una planificación concienzuda de toda nuestra sociedad. Casualmente, esos problemas, que son básicamente, la inseguridad, la falta de una adecuada educación básica, la deficiencia del sistema de salud pública y el peor de todos y raíz de los demás, la corrupción pública, son del interés de todos los sectores, sean polarizados o no polarizados, melistas o golpistas, liberales o nacionalistas, trabajadores o empresarios, militares o civiles, y no solo pueden, sino que deben ser la plataforma para el inicio de un gran diálogo y planificación nacional a mediano y largo plazo.

Verán. Si todos los hondureños estamos claros y de acuerdo en la manera en la que se debe abordar los problemas básicos, no importa qué gobernante se encuentre calentando el tálamo presidencial, se limitará a cumplir con los planes de nación y a administrar la cosa pública. Si regresa al poder Manuel Zelaya, bienvenido, cumpla con el compromiso de nación, pero si no regresa, la unidad de los hondureños en estos temas se deberá hacer respetar. Sé que no es una decisión sencilla sentarse y dialogar con nuestros supuestos enemigos, pero es hora de dejar los caprichos de la niñez y levantarnos hacia una verdadera hondureñidad. Nuestras decisiones en este momento crucial e histórico de la patria serán juzgadas por las futuras generaciones. Unámonos hacia un fin común, aunque mantengamos nuestras luchas particulares, hacia la Honduras que todos soñamos, de manera que nuestros hijos cumplan con “el sueño hondureño”, y no deseen migrar más hacia el Imperio en busca del sueño americano. Saludos.

jueves, 10 de septiembre de 2009

No seamos más un mal experimento capitalista

Dr. Edwin Francisco Herrera Paz
Estoy viendo una presentación muy interesante que me envió uno de mis contactos de correo electrónico. Se trata de una lección sobre los principios del socialismo. Resumiéndola va más o menos así: Estaba un profesor universitario discutiendo con sus alumnos sobre los beneficios de un sistema de libre mercado, pero los alumnos eran, en su mayoría, partidarios del socialismo. El maestro, para darles una lección, les dijo que para calificar utilizaría un modelo socialista: repartiría la nota en partes iguales para todos los alumnos. Es decir, promediaría las notas de todos los alumnos y a todos los calificaría con el promedio.

Para el primer examen todos pasaron. El promedio fue de 77%. Pero los mejores alumnos, o sea aquellos que se esforzaban más en sus estudios, se sintieron desilusionados, pues trabajaron más duro y recibieron la misma nota que los peores. Para el segundo examen comenzó el desastre. Los mejores alumnos decidieron que no valía la pena esforzarse tanto ya que de cualquier forma obtendrían la misma nota que los demás. Los otros alumnos también decidieron que no valía la pena esforzarse, pues de todos modos pasarían a expensas de los mejores. Así, para el segundo examen el promedio bajó a 66%. Pronto muchos alumnos presintieron el desastre y quisieron retirar la clase, pero era muy tarde pues el período asignado para retiros había pasado. No había salida. El tercer examen fue el desastre total y toda la clase reprobó. El punto del maestro fue probado. En un sistema socialista los seres humanos creativos y proactivos de la sociedad, aquellos que generan riqueza, viven inconformes al no obtener un incentivo acorde con sus capacidades. Los demás no se esfuerzan tanto pues saben que tendrán suplidas sus necesidades básicas con el mínimo esfuerzo. Gran lección.

Analicemos esta lección. La lección asume, para comenzar, que las mejores notas las sacan aquellos alumnos que se esfuerzan más, por lo tanto la nota está dada en función de una cualidad moral: el trabajo duro y tesonero. ¿Sucede esto en la vida real? Todo maestro sabe que las notas de los alumnos dependen de varios factores que son: 1) La inteligencia del individuo, que dependerá tanto del acerbo genético como de factores ambientales, como la alimentación y la estimulación intelectual en la niñez. 2) El ambiente actual. Un individuo que debe trabajar para poder costearse sus estudios tendrá menos tiempo para dedicarse a estudiar que un individuo que no trabaja. Los problemas de tipo familiar y emocional también son factores importantes a la hora de obtener resultados académicos. 3) El pasado educativo del individuo. Los profesores universitarios sabemos que parte del desempeño de los alumnos depende de la calidad de su educación media.

A ver. Usted es un profesor universitario y tiene dos alumnos. Está dispuesto a evaluar con equidad y justicia, por lo que el mejor de los dos sacará la mejor nota. El primero tuvo la dicha de nacer en un hogar de altos ingresos, asistió a la mejor escuela de la ciudad, recibió todo tipo de cursos incluyendo educación musical y diferentes deportes. El segundo, nació en un hogar humilde. Tuvo que trabajar desde pequeño para ayudar con la economía de su casa, asistió a escuelas públicas en las que los maestros pasaban en huelga la mitad del período académico, y no obtuvo ningún tipo de estimulo intelectual en su niñez y adolescencia. Muchas veces se acostó con hambre, por lo que no alcanzó la potencial estatura e inteligencia que su acerbo genético le permitiría. Por lo demás, ambos alumnos son iguales. Dispuestos a dar todo de sí para sacar las mejores calificaciones. ¿Cuál de los dos cree usted que tiene mayores probabilidades de pasar sus clases y obtener mejores notas?

Algo más. Siempre habrá alumnos que comprendan mejor el sistema y aprendan a manejarlo. Para sacar mejores notas algún alumno podrá, por ejemplo, hacerse amigo del profesor, o encontrar una excelente forma de hacer trampa sin ser descubierto. Al final obtendrá una excelente nota, pero injustamente. ¿Y si el maestro es tramposo y obsequia notas a cambio de “favores”? ¿Qué derecho moral tendrá para hacer reclamos a sus alumnos tramposos?

Pues bien, en nuestro país, al igual que en gran parte de las Américas, la alimentación, la salud y la educación de la mayoría de los niños son deficientes. Las desigualdades son enormes, y es así como el grueso de la población no puede competir laboralmente con aquellos pocos que tienen las oportunidades. A muchos no les queda otra salida que emigrar hacia el gigante del norte, en busca de un futuro decente. Eso sin mencionar la enfermedad de los sistemas gubernamentales llamada corrupción, de la que no puede escapar ni el más probo de los individuos. Grandes porcentajes de los presupuestos nacionales quedan distribuidos en una pirámide de funcionarios que va desde los puestos de menor categoría hasta las más altas esferas de poder. Todos quieren su tajada. Otro gran porcentaje de dicho presupuesto es despilfarrado, dejando virtualmente vacías las arcas para el alivio de las necesidades básicas y apremiantes, como la salud y la educación.

Por lo tanto, el experimento de nuestro maestro resulta ser muy efectivo probando lo malo que son los sistemas socialistas, pero no nos dice nada sobre los excesos y los fracasos de los sistemas de libre mercado. Para poder sacar conclusiones adecuadas, tendríamos que efectuar el experimento en los dos sentidos. El hecho de que la opción A sea mala no nos dice que la opción B sea perfecta, o incluso buena. Para probar las bondades del sistema de libre mercado el profesor debería otorgar a cada quien la nota que se merece, pero cuidando de controlar las otras variables, como el que todos los alumnos hayan tenido las mismas oportunidades de recibir una educación básica adecuada. Además, para evitar los sesgos el profesor deberá imponer una vigilancia extrema para que así no haya cabida a ningún tipo de trampa por parte del alumno. Intuyo entonces que resultará que el experimento demostrará que el sistema de libre mercado será beneficioso para la mayoría, pero únicamente bajo esas condiciones: brindar iguales oportunidades básicas y controlar los excesos de una minoría que se aprovecha de las fisuras legales y políticas del sistema para su propio beneficio, en detrimento de las grandes mayorías.

Los políticos hondureños se enfrentan en este momento histórico a un enorme reto, que es convencer a un pueblo que ha despertado de su letargo, y que no se dejará persuadir con simples slogans baratos y cancioncitas pegajosas. Los hondureños demandamos el compromiso y el cumplimiento a largo plazo de verdaderas soluciones a los problemas en los temas de salud, educación, seguridad, y el más importante, la corrupción pública; que sean los mejores hondureños en los distintos campos los involucrados en el manejo del estado, y que los puestos no sean dados por amiguismos, compadrazgos o compromisos políticos. Los problemas prioritarios no deberían ser objeto de campaña política, excepto para explicar con rigurosidad la manera en la que los candidatos están dispuestos a abordarlos. De no atender estos temas Honduras continuará siendo, por mucho tiempo, un mal experimento capitalista. Saludos.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

¿Resistencia o resiliencia?


Edwin Francisco Herrera Paz

Las redes de comunicación pueden ser usadas con fines constructivos o destructivos. El poder de la energía atómica puede ser usado para proveer energía a miles de hogares, o para destruir una ciudad en cuestión de segundos, o incluso para destruir el género humano. Las técnicas de biología molecular pueden utilizarse para fabricar vacunas contra microorganismos asesinos, o para convertir microorganismos inocuos en asesinos por medio de la práctica del bioterrorismo. El transporte nuclear de células somáticas (clonación) se podrá usar para construir órganos nuevos que substituirían a los dañados, y como consecuencia salvarían vidas, o para construir un ejército de humanos exterminadores mejorados (¿recuerda “Los niños del Brasil”?). De la misma manera, la red podría ser utilizada para mejorar las comunicaciones entre grupos colaboradores en distintas ramas del quehacer humano, como la ciencia, la política, los asuntos de estado, la democracia, etc., o para organizar guerras, terrorismo cibernético, y terrorismo psicológico (mediante la rápida divulgación de falsos rumores).

Siempre llevar a cabo labores constructivas requerirá un mayor esfuerzo que realizar labores destructivas, ya que la segunda ley de la termodinámica nos dice, en palabras sencillas, que es más fácil desorganizar que organizar. En ese sentido, la misma vida en todos sus niveles de complejidad, incluyendo la organización social, parece desafiar dicha ley. Por eso el estudio de la vida, llámese célula, órgano, individuo, comunidad, organización, sistema financiero o sociedad global, es tan interesante. ¿Cómo es posible que estos sistemas evolucionen siempre hacia configuraciones progresivamente más complejos? ¿Interviene Dios y de qué forma en el desarrollo de dichos sistemas? ¿Por qué hay fuerzas destructivas? ¿No sería deseable que en el universo solo hubiera fuerzas constructivas? Estas y otras preguntas son objeto de discusión en la actualidad en diversos campos del conocimiento, que van desde la física de partículas, a la biología, la teología, la sociología, la economía y las ciencias políticas, participando todas en el estudio de una disciplina en común que hoy en día se denomina “Sistemas Complejos”, y es así como, por ejemplo, un biólogo experto en ecología en los Estados Unidos se atreve a aconsejar a los expertos en economía sobre estrategias financieras.

Usted se habrá dado cuenta de que he utilizado los términos “procesos constructivos” y “procesos destructivos”, en lugar de los apelativos de procesos buenos o malos, por una sencilla razón: ambos tipos de procesos son necesarios en la evolución de los sistemas complejos.

El sistema óseo humano (nuestro esqueleto), por ejemplo, está compuesto por una matriz de la proteína llamada colágeno, que le proporciona flexibilidad, y de hidroxiapatita, una sal de calcio que le proporciona resistencia. El esqueleto cumple las funciones del andamio del cuerpo, y también de protección dada su dureza. Así, protege de traumatismos a órganos vitales como al encéfalo (cráneo), a los pulmones y al corazón (caja torácica). Estamos claros que una de las características funcionales del esqueleto es su resistencia.

Pero el esqueleto no es solo un andamio inerte, como el que sostiene a un edificio. En su matriz habitan dos tipos celulares: los osteoblastos, en cargados de construir el tejido óseo (proceso constructivo), y los osteoclastos, encargados de degradarlo (proceso destructivo). Estos dos procesos simultáneos y mutuamente complementarios origina el proceso llamado “remodelación ósea”. Este último hace del esqueleto una estructura dinámica, adaptable. Ante ciertos estímulos ambientales, como el aumento en la actividad física, aumenta la actividad de los osteoblastos, aumentando el tamaño de los huesos y por ende, la capacidad de soportar fuerzas estresantes. Por el contrario, en un ambiente de ingravidez, por ejemplo, predominará la actividad osteoclástica. El remodelamiento óseo tiene otra función: la reparación continua de pequeñas fracturas o deformidades (inestabilidades del sistema), manteniendo la función y forma normal del hueso en ambientes cambiantes, lo que hace al sistema óseo una estructura adaptativa, capaz de adaptarse a diferentes niveles de estrés físico.

La vida en todas sus formas se caracteriza por su adaptabilidad al ambiente mediante diferentes sistemas autorregulados, y mediante procesos constructivos y destructivos. Las células se encuentran en un constante dinamismo, destruyendo y reciclando proteínas y sintetizando nuevas. El desarrollo de los embriones se caracteriza por el surgimiento de estructuras que contienen células que deberán morir por un proceso de muerte celular programada llamada apoptósis, y así permitir el correcto desarrollo de los órganos. En las sociedades humanas, cada generación envejece y finalmente muere, cediendo su lugar a la siguiente generación con ideas renovadas. La vida se destruye y se renueva continuamente, y este proceso es necesario para crear en los sistemas vivos la capacidad para absorber ataques ambientales de diversa índole, convirtiéndolos en adaptativos. A esta característica de los sistemas vivos la podemos llamar “resiliensia”, tomando el término prestado de la psicología.

La sociedad humana ha logrado dominar la tierra gracias a su enorme resiliencia. Los sistemas sociales humanos son en extremo dinámicos, cambiando constantemente merced a diversos fenómenos, como el antagonismo entre grupos, las guerras y las revoluciones. A lo largo de la historia de la humanidad vemos a las sociedades compitiendo o cooperando, pero siempre rediseñandose, adaptándose a los cambios continuos surgidos de la tecnología, la ciencia, la religión, la política o los sistemas de producción.

Los grupos inconformes y revolucionarios se oponen siempre al status quo, en el que grupos de poder logran dominar el sistema cayendo en un círculo vicioso de corrupción y derroche. Todos los grandes imperios de la historia han terminado en decadencia cuando su poder se ha vuelto excesivo, controlador y abusador, y de no ser por la diversidad de pensamiento de las sociedades, el inconformismo y la lucha por la liberación de la opresión, la humanidad entera degeneraría en un caos orgiástico y decadente en el que unos pocos (los cultural o genéticamente mejor provistos) amasarían un poder desmedido, tal vez autodestruyéndose por los excesos, mientras la inmensa mayoría caería en la lipidia, muriendo de hambre. Afortunadamente para nuestra especie, el espíritu humano no se conforma, es inquieto, siempre está en busca de soluciones a los problemas, siempre creando nuevas formas de hacer las cosas, y la diversidad de ideas siempre generando antagonismos que devienen en nuevas síntesis, consistentes en tomar los elementos deseables de las formas de pensar pasadas para encontrar mejores soluciones, o alternativamente, cambiando de manera radical un sistema decadente y substituyéndolo por otro.

Así, en la actual crisis política, podemos ver a la denominada “resistencia” como un grupo de revoltosos, mancha paredes, irrespetuosos, bochincheros y comanches, o verla desde una perspectiva diferente: un grupo heterogéneo de hondureños luchando contra el status quo, que incluye, claro, revoltosos y delincuentes de todos los tipos (¿en qué gremio no los hay?), pero también intelectuales y hondureños sinceros, que quieren soluciones reales para nuestro país, como el combate genuino a nuestros flagelos históricos como lo son la corrupción y la deficiencia en la educación y la salud pública, que nos han impedido salir a flote en el miserable mar da la inopia. Esta es una fuerza modeladora que deberá ser usada por la hondureñidad hacia mejores derroteros; que la resistencia sea un factor de resiliencia futura para nuestro pueblo. Y creo, además, que la mejor manera de lograrlo a estas alturas del partido es mediante una apertura sincera y transparente de las partes que permita el inicio de un diálogo orientado a buscar las mejores soluciones, encaminado hacia  esa nueva síntesis. Saludos.

viernes, 4 de septiembre de 2009

El Oráculo del Pueblo

Inteligencia de enjambre
En un mundo complejo, cada vez más globalizado, nuestras decisiones y las decisiones de los gobernantes, tienen repercusiones impredecibles. ¿Quiere un ejemplo? El presidente Chávez, acostumbrado a que las grandes potencias se dobleguen ante su poder petrolero no pudo doblegar un pequeño país tercermundista y en extremo pobre gracias a las redes de comunicación a la que tienen acceso los ciudadanos de la clase media. Otro ejemplo. Mañana se efectuará una marcha en contra del ex presidente Chávez, orquestada y simultanea en todo el mundo, un fenómeno nuevo, nunca antes visto contra un mandatario.

Lo que los mandatarios de los diferentes países del mundo consideran decisiones sabias, ya no lo son tanto y muchas veces traen resultados inesperados y contraproducentes. Es así como la disposición del gobierno de los Estados Unidos de congelar la Cuenta del Milenio a Honduras podría traer derivaciones adversas aun para los mismos Estados Unidos. Las consecuencias son desconocidas aun para los analistas más inteligentes y perspicaces, merced de la complejidad e interrelación de las sociedades actuales.

Un fenómeno que los mandatarios -obsoletos y carentes del conocimiento tan necesario sobre los sistemas complejos en la sociedad globalizada- han ignorado es la amplificación de las señales beneficiosas o aceptables a través de la red. Dichos mandatarios han venido siendo castigados duramente por la crítica mundial, y seguirán siéndolo mientras no tomen las decisiones adecuadas basadas en la inteligencia colectiva: especie de oráculo que nunca o pocas veces se equivoca y representado por la voz conjunta de la multitud. Lo difícil de comprender es como, teniendo los elementos y herramientas necesarias para la instauración de modelos de gobierno más abiertos, funcionales y sabios, los estados continúan aferrados a los viejos esquemas. Si usted es observador notará que no ha ocurrido lo mismo con los sistemas sociales y financieros que han evolucionado hacia esquemas flexibles y de rápida respuesta. Si el derrumbe financiero reciente es una prueba del efecto dominó en el mundo globalizado, e indica que el sistema financiero necesita mejoras, la destitución de Zelaya en Honduras y la respuesta de los gobiernos del mundo muestra que el sistema político internacional actual tiene siglos, o quizá milenios de retraso.

Superorganismo
Lo que estamos viendo en la actualidad es la manera en la que el sistema social mundial interconectado comienza a invadir las esferas de poder de los gobiernos, que han sido la exclusividad de unos pocos, exigiendo a gritos ante los oídos sordos de los gobernantes, su cuota de poder: un poder distribuido entre la colectividad mundial. Es así como, a más de un mes de la destitución del presidente Zelaya en Honduras, los gobiernos no comprendían ni aceptaban el hecho, mientras los ciudadanos comunes de los pueblos nos daban en su mayoría su apoyo incondicional, al igual que el apoyo a los ciudadanos venezolanos que protestan en las calles de Caracas en la actualidad y a los jóvenes colombianos ofendidos ante los insultos de Chávez, lo cual ha resultado en la marcha mundial que se vislumbra de proporciones gigantescas.

Esto es, la señal de unos pocos ciudadanos del mundo protestando contra injusticias, amplificada en la red social, tiene un efecto mundial: miles o quizá millones de personas a lo largo y ancho del planeta actuando al unísono. ¿Recuerda los cardúmenes de peces? Nadie en su sano juicio creerá que un pez es muy inteligente, sin embargo el cardumen exhibe un comportamiento grupal que raya en la genialidad. Eso es inteligencia colectiva. La clave está en la comunicación, y el habitante común del planeta tiene ya las herramientas para formar parte de una inteligencia colectiva mundial.

Cardumen inteligente
Este sistema social global causará un caos y desestabilización mundial, predecible desde el punto de vista de los sistemas complejos, que durará por lo menos hasta que los gobiernos decidan incorporarlo a los esquemas de mando en las naciones. No es una opción. Es cuestión de tiempo. La globalización y la redistribución del poder entre los ciudadanos son resultados inevitables de un mundo más complejo e interconectado. Está en las manos de los gobernantes utilizar las herramientas tecnológicas para así basar sus decisiones en la llamada inteligencia colectiva.

Algunos partidarios del socialismo han dicho que la opinión del ciudadano común en asuntos especializados no supera a la del técnico asesor de un gobierno, y que las mejores decisiones son tomadas por un caudillo. FALSO. La ciencia moderna ha probado todo lo contrario. Las decisiones más certeras son tomadas por el promedio de la colectividad. Pero entonces no hablemos ya del ciudadano común dando su opinión, sino de la legión de expertos de un país en un asunto en particular, originando ideas, y apoyados, no digamos por el ciudadano común, sino más bien por la colectividad de los ciudadanos del estado para generar las mejores decisiones en diferentes asuntos. A este aparato, al que usted alimenta con un problema y obtiene como salida el conjunto de las mejores decisiones posibles para el problema en cuestión, le he llamado “el oráculo del pueblo”. Esto es, repartición, o más bien difusión del poder creativo de todos los elementos de una nación. Aunque a usted le parezca mentira, ya tengo un esquema de proyecto que pondrá la inteligencia colectiva al servicio de las naciones y que cambiará al mundo, comenzando por los países que primero lo adopten.

Ayer quería conquistar al mundo. Hoy, solo mejorarlo. Que tenga buen día.

Las redes sociales son un esbozo primitivo de lo que puede ser una red democrática: Honduras bajo la lupa: Las Redes Democráticas y los Sistemas Sociales.